💞 Medusa Romero
Ahora que ya no miro con ojos de niña, ahora veo el mundo con ojos de artista , ahora entiendo que tú esencia
es lo más dulce que perfumara mi vida.
Sé que la felicidad y el sufrimiento
van de la mano, lo sé desde el primer momento en el que mi corazón empezó a latir en este mundo mortal . Lo sé porque en ese momento, me lo dijeron tus lágrimas.
Tus lágrimas en esos momentos
mezclaban el impacto de mil relámpagos con la auténtica inconfundible felicidad.
Quizá no recuerde,
mis primeros instantes de vida.
quizá ni siquiera sean un reflejo
de cómo imagino que fueron
lo que sí recuerdo son las horas,
los días, los meses que transcurrieron después de ese mes de noviembre.
Recuerdo todos esos cuentos
a media noche y como tú voz
serena me transportaba a un mundo mágico donde pude creer en las hadas, sirenas y fantasmas. Donde todo era como tú y yo queríamos.
Recuerdo como curabas
las heridas de mis rodillas y con un beso
me hacías creer que el dolor desaparecía
al instante.
Recuerdo cuando me enseñaste
que el bien siempre triunfa sobre el mal
Quizá te hayas dado cuenta que recordar
es una de mis palabras favoritas
porque su significado realmente
me tocó el corazón.
Porque recordar es volver a pasar
por el corazón y tú eres una de las pocas personas que me hace recordar.
Porque sé que cuando toques mi corazón, tus delicadas manos curaran toda herida
y lo acariciara deseando que todo el rencor acumulado se pierda.
Y por esa razón hazme recordar
que siempre estarás a mi lado
combatiendo conmigo mis peores miedos.
Y por último , gracias por enseñarme
que la magia si existe
y que es muy fácil de crear solo necesito, que me abraces fuerte y me susurres
un té quiero.
Dedicado a mi madre que me enseñó que rendirse nunca es una opción.
Brenda Adame castillo.